¡Vamos de compras! Por: La Golondrina

Actualmente, el hombre se considera un autómata que rige su vida por la producción y el consumo de bienes y servicios. El problema es que no se consume todo lo que se produce y cuando existen “sobras”, son desechadas inmediatamente. Sin embargo, en algunas regiones de Australia, existe un grupo específico de personas que ejemplifican un famoso refrán: “beauty lies in the eyes of the beholder”, pues lo que es considerado inservible para la mayoría es de mucho uso en la vida de ellos.

Se les conoce como “Dumpster Divers” y a pesar de ser malentendidos por sus hábitos y costumbres inusuales, son un grupo muy particular en la sociedad moderna. Los “Dumpster Divers” son individuos que hacen todas sus compras – comida, muebles, ropa – en los basureros públicos. Buscan cualquier cosa que pueda ser de uso o valor, lo ponen en la carreta y se lo llevan directamente a casa. ¿Qué sencillo verdad?

En realidad, los basureros son una fusión entre un supermercado y un centro comercial, pues uno encuentra ¡de todo! Empezando por el pasillo de la comida, en donde uno puede “comprar” una variedad de alimentos, como carnes, frutas y vegetales, que son desechadas antes de expirar; el pasillo de muebles, en donde se ofrecen camas de todos tamaños, sillas, sofás y mesas…y la sección de electrónicos: computadoras, televisores, radios, teléfonos, podadoras, etc.

Los “Dumpster Divers” son personas consideradas, pues son los únicos que se preocupan por reciclar y sacarle provecho a cada cosa. Entonces, en lugar de etiquetar a estos individuos como sucios, uno debe valorar lo que hacen día a día. ¿De qué sirve permitir que se arruine una docena de bananos maduros? ¿O una televisión que aún funciona? Es preferible darle el mejor uso a todo lo que se ofrece en el mundo, inclusive en los basureros.